Escasez de Materias Primas en la Industria del Plástico
A causa de la pandemia del Covid-19 nos hemos visto envueltos en un “efecto domino” que ha azotado a la economía mundial. A este, se le han unido episodios climáticos extremos y situaciones de fuerza mayor adversas que no suelen coincidir en el tiempo como el bloqueo del canal de Suez, incendios o escasez de contenedores.
Este inusual cóctel de escenarios ha traído consecuencias a nivel global en el sector de la industria, como la falta de materias primas, cuya escasez, pronostican resultados fatales para miles de empresas y millones de usuarios.
El sector del plástico no es una excepción, viéndose tremendamente afectado por la subida de precio de las materias primas e incluso la escasez actual de estas. Los motivos son varios, pero el principal se atribuye a la reducción del consumo de combustible y su consecuente disminución de extracción de petróleo, causa que haya menos nafta, menos etano y menos etileno.
¿Cómo combatir la escasez de las materias primas plásticas?
La escasez de los plásticos es un problema que tendremos que lidiar hasta la estabilización del mercado. Como solución más efectiva, se plantea utilizar plástico reciclado gracias a la propiedad de los termoplásticos que permite que se puedan reutilizarse varias veces.
Esta alternativa no solo se nutre de la falta de abastecimiento de materias primas, sino que hay otros temas encima de la mesa como la economía circular, la sostenibilidad, el cuidado del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.
No obstante, la perdida progresiva de propiedades de los termoplásticos a medida que se reutilizan imposibilita la utilización de materiales reciclados para fabricar piezas que precisan de aquellas propiedades para su uso. Este inconveniente nos aboca a la pertinente necesidad de utilizar polímeros nuevos que, con la situación actual, hemos de aprender a optimizarlos para que el sobrecoste de la materia prima y su falta nos afecte en menor medida.
¿Cómo podemos optimizar el consumo de plástico?
El consumo de plástico en el proceso de fabricación no se limita solamente al material que compone la pieza en sí, sino que hemos de contar también con el consumo de plástico destinado a la merma de material (canales de inyección, piezas con tara, piezas incompletas, ensayos de inyección, piezas erróneas…).
Reducir esta merma se consigue invirtiendo en la calidad del proceso de inyección.
Para ello, contar con un molde de alta calidad con la geometría ideal a todos los niveles, los materiales pertinentes, dureza, acabados, accesorios… permite al fabricante minimizar errores y reducir el consumo de materia prima por merma hasta un 30% y aumentar la producción hasta un 30%.
Paralelamente, la eficiencia en el proceso de inyección también nos reportará ahorros en el consumo eléctrico cuyo precio actualmente se encuentra desorbitado.
En Santos & Schulz apostamos desde hace más de 20 años por la excelencia de nuestros moldes y servicios. Nuestro control de calidad exhaustivo permite que nuestros clientes reciban sus moldes una vez han pasado un seguido de controles y test para que la pieza resultante sea sencillamente perfecta. De esta forma cuando recibes el molde solo tienes que instalarlo en tu máquina de inyección y empezar a producir de forma optimizada.
